Esta Escuela Municipal parte de una edificación existente y de una normativa específica. Manteniendo el volumen existente, se organiza y redistribuye el programa, en relación a los tres ciclos escolares. Cada aula se contamina de un color diferente, cuya mezcla se traslada a la pérgola exterior que genera y da sombra, tanto a los recorridos entre las diferentes aulas como al espacio común de los juegos infantiles. Este proyecto, conjuntamente con el de la Escuela Municipal de Educación Infantil de el Lasso, pretenden buscar el mismo lenguaje a la hora de intervenir en la edificación existente.