La vivienda tiene una característica un tanto singular debido a su ubicación en la parcela ya que se eleva casi 4 metros por encima de la rasante de la calle quedando apoyada sobre otra vivienda existente que funciona como basamento. El cliente quería construir su vivienda en la azotea de la vivienda de sus padres y ésta se plantea como un modulo aislado situado en una posición privilegiada donde se le da una mayor importancia a la comunicación visual con el lugar. El exterior se encuentra en el interior y bajo esa premisa se va desarrollando el programa de la casa, donde todos los espacios interactúan con el exterior potenciando esa relación que aunque parezca lejana se apodera de la vivienda, creando así una “atalaya” desde la cual se observa todo el litoral y la cumbre del Municipio de Candelaria.